Desde hacía bastante tiempo estaba anotado en el cuaderno del taller la incorporación de algún Renault Clio de la marca Scalextric o de cualquier otra, pero los elevados precios y escasas unidades hacían que esto fuera cosa imposible. Un día cualquiera, de rebote, se presentó la oportunidad de incorporar un Renault Clio de la marca Ninco que pedía a voces ser reparado.
Se trataba de un Renault Clio Super 1600 con publicidad de Battery y de PlayStation2 sin neumáticos, sin espejos, sin alerón y sin una pieza del techo. Su precio 12€, para nada una ganga, pero quizás dentro de un futuro cuando esté restaurado viendo el gasto total haya merecido la pena.
Este coche es la referencia 50368 de Ninco, un Made in Spain muy atractivo que venía con algo de suciedad además de la falta de las piezas sensibles que he nombrado antes.
El primer paso fue observar a ver si tenía alguna rotura más significativa en el chasis, carrocería, cristales o huecos de los tornillos, pero para satisfacción mía estaba todo el grueso del coche en buenas condiciones.
Lo siguiente ver si funcionaba el motor, un NC5 de 20.000 r.p.m., que no está nada mal. Y funcionaba, pese a un fallito que más adelante será comentado. La pena fue no poder rodarlo y ver cómo se desenvuelve en pista, pero me han comentado que va de lujo.
Llegó el momento de abrirlo y ver sus entrañas, que como era de esperar, estaban llenitas de suciedad: pelusas, pelos, grasa, polvo... se prestaba a un adecentamiento. ¡Ah que se me olvidaba comentarlo! y un cambio de trencillas, pero eso para posteriores reparaciones.
Llama la atención del exterior de este coche los discos de freno simulados, le dan un toque más realista al asunto. Y en el interior la amortiguación que trae en las cuatro ruedas y que estaba en perfecto estado. Según me han comentado le da mucha estabilidad y además hay varios tipos que se distinguen por colores. Estas que son rojas son las más blandas, luego hay unas azules que ofrecen una amortiguación media y unas amarillas que son más duras.
Le di un buen limpiado a todo, desmontando cada pieza que estaba en el chasis incluidos los cuatro amortiguadores, ejes, motor, etc. No os podéis imaginar la de grasa que había por todos sitios. De hecho en la foto del disco de freno se aprecia un poco cómo estaba el motor. Con paciencia y alcohol y bastoncillos fui sacando la suciedad, cambiando a bastoncillos y agua en las zonas que quizás el alcohol podía estropear.
Como comenté al principio, el motor tenía un pequeño defecto, y es que el hilo de cobre se había soltado. Esto no era impedimento para que funcionase pero seguro que es mejor que esté en su sitio. Yo no es que entienda del asunto, pero lo intenté poner en su sitio estilo compadre con la punta de un destornillador de cabeza plana y unas pinzas. No es que sea definitivo, pero parece que aguanta.
Cuando le metí mano a la carrocería me di cuenta que el color negro disimulaba un poco los hongos, así que le di una buena limpieza también con alcohol y bastoncillos por el interior. En estas fotos se puede ver el resultado final del trabajo.
Como cierre al post, comentar que en el futuro me gustaría meterle mano en serio a este coche y ponerle las piezas que faltan. Como mínimo los neumáticos y las trencillas nuevas para poder rodarlo y disfutar de él en pista. Ya os iré contando.
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1 comentarios:
Muy chulo! A ver si puedes rodarlo pronto! Por cierto, tienes alguna entrada sobre motores?
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